Las ratas de París, aplastadas, escondidas y lo más lejos posible del escenario olímpico

La organización de los Juegos ha puesto trampas, limpiado las calles y cerrado alcantarillas

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Una rata, en una calle de París AFP

ÁNGEL LUIS MENÉNDEZ

23/07/2024
Actualizado a las 17:26h.

Que no asome el hocico ni una sola rata. Ni siquiera el simpático Ratatouille, protagonista que da nombre a la famosa película de dibujos animados de Disney. París quiere aprovechar los Juegos Olímpicos para vender a los visitantes y al mundo, una vez más, la ciudad. Y en la proyección idílica de la capital de Francia no tienen cabida los numerosos roedores que en ella habitan.

«Todas las sedes olímpicas y las zonas de celebraciones han sido analizadas antes de los juegos», asegura en una entrevista con la agencia AFP Anne-Claire Boux, concejala de Salud Pública del Ayuntamiento parisino. A la par, los responsables municipales ordenaron una limpieza profunda de las calles para eliminar restos de alimentos que puedan tentar a los roedores a abandonar sus escondites subterráneos y cerraron las salidas a la superficie de las alcantarillas más próximas a los sectores olímpicos.

«En zonas con muchas ratas pusimos trampas antes de los Juegos», añadió Boux. En concreto, detalló que se han utilizado tanto trampas mecánicas como químicas con el objetivo de reducir esa indeseada población animal.

El parque a los pies de la torre Eiffel, donde se disputará el vóley playa, y los jardines del Museo del Louvre, donde arderá la llama olímpica, son algunos de los rincones preferidos por los vecinos de París para celebrar pícnics y, en consecuencia, los preferidos por las ratas.